El IVIMA, Instituto de la Vivienda de Madrid, es el organismo encargado de regular y supervisar el mercado de alquiler en la Comunidad de Madrid. Uno de los requisitos más importantes que deben cumplir los arrendadores es el depósito de la fianza en este organismo.
La fianza es una cantidad de dinero que el inquilino entrega al propietario al inicio del contrato de arrendamiento. Este depósito tiene como finalidad asegurar el cumplimiento de las obligaciones contractuales por parte del inquilino, así como cubrir posibles daños o desperfectos que se puedan ocasionar en la vivienda durante la duración del contrato.
El depósito de la fianza en el IVIMA es obligatorio según la legislación vigente en la Comunidad de Madrid. Esta medida busca proteger tanto a los inquilinos como a los propietarios, garantizando el cumplimiento de las obligaciones contractuales y evitando posibles conflictos o abusos por alguna de las partes.
Para realizar el depósito de la fianza en el IVIMA, el arrendador debe seguir unos pasos específicos. En primer lugar, debe solicitar una cita previa a través de la página web del IVIMA o llamando a su teléfono de atención al ciudadano. Una vez obtenida la cita, el arrendador deberá presentarse en la oficina del IVIMA correspondiente con la documentación necesaria.
Esta documentación incluye el contrato de arrendamiento debidamente firmado por ambas partes, el DNI tanto del arrendador como del inquilino, así como el justificante del pago de la fianza. Es importante destacar que el importe de la fianza debe ser equivalente a una mensualidad de renta, aunque en determinados casos puede ser superior.
Una vez presentada la documentación, el IVIMA procederá a la inscripción de la fianza en el Registro de Fianzas de la Comunidad de Madrid. El arrendador recibirá un justificante de este depósito, el cual deberá conservar durante toda la duración del contrato.
Es importante destacar que el depósito de la fianza en el IVIMA no exime al arrendador de la obligación de cumplir con el resto de las obligaciones establecidas en la legislación vigente. Esto incluye la realización de los correspondientes contratos de arrendamiento, el pago de los impuestos correspondientes y el mantenimiento de la vivienda en condiciones adecuadas para su habitabilidad.
En caso de incumplimiento de estas obligaciones, el IVIMA puede llevar a cabo las actuaciones necesarias para garantizar su cumplimiento, así como imponer las sanciones correspondientes. Además, en caso de conflicto entre el arrendador y el inquilino, el IVIMA puede actuar como mediador para buscar una solución amistosa.
Casero sin depósito de fianza en Ivima: ¿Qué hacer?
Si eres inquilino de una vivienda del Instituto de la Vivienda de Madrid (IVIMA) y te encuentras en la situación de tener un casero que no ha solicitado el depósito de fianza legal, es importante que conozcas tus derechos y las acciones que puedes tomar al respecto.
En primer lugar, es importante tener en cuenta que la Ley de Arrendamientos Urbanos establece que el casero está obligado a solicitar y depositar la fianza correspondiente en el Instituto de la Vivienda de Madrid. Esta fianza tiene como finalidad garantizar el cumplimiento de las obligaciones del inquilino durante el contrato de arrendamiento.
Si el casero no ha solicitado el depósito de la fianza en el IVIMA, esto puede suponer un incumplimiento de la ley y una vulneración de tus derechos como inquilino. En este caso, tienes varias opciones para actuar:
1. Comunicar al casero: Lo primero que debes hacer es comunicar al casero de forma escrita que no ha realizado el depósito de la fianza en el IVIMA y solicitarle que lo haga en el plazo de 30 días. Puedes enviar esta comunicación mediante carta certificada con acuse de recibo para tener constancia de que has realizado esta reclamación.
2. Denunciar ante el IVIMA: Si el casero no realiza el depósito de la fianza en el plazo establecido, puedes denunciar esta situación ante el Instituto de la Vivienda de Madrid. Para ello, deberás presentar una solicitud de mediación o una denuncia formal, adjuntando la documentación que acredite la existencia del contrato de arrendamiento y la falta de depósito de la fianza.
3. Acudir a los tribunales: Si el casero persiste en su negativa de realizar el depósito de la fianza, puedes interponer una demanda judicial contra él. En este caso, será necesario contar con el asesoramiento de un abogado especializado en derecho de arrendamientos para llevar a cabo este proceso.
Es importante destacar que, en caso de que el casero no haya solicitado el depósito de la fianza, no podrás utilizar esta como medio de pago del último mes de alquiler. La fianza solo puede ser utilizada para cubrir posibles daños o incumplimientos del inquilino durante el contrato de arrendamiento.
Obligatoriedad de depositar la fianza
La obligatoriedad de depositar la fianza es una normativa legal que establece que los arrendadores deben solicitar a los inquilinos el pago de una cantidad económica en concepto de fianza al momento de firmar un contrato de alquiler. Esta fianza tiene como objetivo garantizar el cumplimiento de las obligaciones contractuales por parte del inquilino, así como cubrir posibles daños o impagos que pueda ocasionar durante su estancia en la vivienda.
La ley de arrendamientos urbanos establece que el importe de la fianza debe ser equivalente a una mensualidad de renta en contratos de vivienda habitual, y de dos mensualidades en contratos de uso distinto al de vivienda. Además, esta ley también regula que el arrendador está obligado a depositar dicha fianza en un organismo público competente, como puede ser el Instituto de la Vivienda de la Comunidad Autónoma correspondiente.
El objetivo de este depósito de la fianza es proteger los derechos de los inquilinos, asegurando que en caso de incumplimiento de las obligaciones contractuales por parte del arrendador, el inquilino pueda recuperar su fianza de forma íntegra. Asimismo, también garantiza que en caso de que el inquilino cause daños en la vivienda o no pague las rentas correspondientes, el arrendador pueda utilizar el importe de la fianza para cubrir los gastos ocasionados.
Es importante destacar que el incumplimiento de la obligación de depositar la fianza puede acarrear sanciones para el arrendador, como multas económicas. Por lo tanto, tanto arrendadores como inquilinos deben estar al tanto de esta obligatoriedad y cumplir con ella al momento de formalizar un contrato de alquiler.
No olvides compartir este artículo con tus amigos y familiares para que todos estén informados sobre la importancia de depositar la fianza en el IVIMA. Juntos podemos promover un cumplimiento responsable de esta obligación.