En el contexto actual de globalización y movilidad, es cada vez más común que los residentes en España sean propietarios de inmuebles en el extranjero. Esta situación plantea ciertas implicaciones legales y fiscales que es importante tener en cuenta.
En primer lugar, es necesario destacar que los residentes en España están sujetos a la normativa fiscal española, independientemente de la ubicación de sus propiedades. Esto significa que deben cumplir con sus obligaciones fiscales tanto en España como en el país donde se encuentren sus inmuebles.
En cuanto a la fiscalidad de los inmuebles en el extranjero, es importante tener en cuenta que existe un régimen especial en España para evitar la doble imposición. Este régimen permite que los residentes en España puedan deducir los impuestos pagados en el extranjero por los ingresos derivados de sus propiedades.
Además, es importante destacar que los propietarios de inmuebles en el extranjero deben informar a las autoridades fiscales españolas sobre la existencia de estos bienes. Esta obligación se cumple a través de la presentación del Modelo 720, en el cual se deben detallar todos los bienes y derechos situados en el extranjero que superen determinados umbrales de valor.
En cuanto a la gestión de los inmuebles en el extranjero, es recomendable contar con un asesor fiscal especializado en la normativa del país donde se encuentra la propiedad. Esto permitirá garantizar un adecuado cumplimiento de las obligaciones fiscales y evitar posibles sanciones.
Por otro lado, es importante tener en cuenta que los propietarios de inmuebles en el extranjero también deben cumplir con las obligaciones legales y fiscales del país donde se encuentre la propiedad. Esto implica estar al tanto de las leyes y regulaciones locales, así como pagar los impuestos correspondientes.
Obligación de declarar bienes en el extranjero
La obligación de declarar bienes en el extranjero es un requisito legal que muchas personas deben cumplir en varios países. Esta obligación se refiere a la necesidad de informar a las autoridades fiscales sobre la existencia y el valor de los bienes que se poseen fuera del país de residencia.
En muchos países, incluyendo España, Estados Unidos y varios países de la Unión Europea, existe un sistema de declaración de bienes en el extranjero. Este sistema tiene como objetivo principal evitar la evasión fiscal y garantizar que los contribuyentes cumplan con sus obligaciones tributarias.
La obligación de declarar bienes en el extranjero generalmente aplica tanto a personas físicas como a personas jurídicas. Las personas físicas deben informar sobre la existencia y el valor de sus cuentas bancarias, propiedades inmobiliarias, inversiones financieras y otros activos ubicados fuera de su país de residencia. Las personas jurídicas, por su parte, deben declarar los activos de su empresa ubicados en el extranjero.
La forma de cumplir con esta obligación varía de un país a otro. En algunos casos, es necesario presentar una declaración anual ante las autoridades fiscales, en la que se detallen los bienes en el extranjero y se indique su valor. En otros casos, es necesario reportar los bienes en el extranjero en la declaración de impuestos anual.
El incumplimiento de la obligación de declarar bienes en el extranjero puede tener consecuencias legales y fiscales. En muchos países, las autoridades fiscales tienen la facultad de imponer multas y sanciones a las personas que no cumplan con esta obligación. Además, en algunos casos, el no declarar correctamente los bienes en el extranjero puede ser considerado como un delito de evasión fiscal.
Obligación de presentar modelo 720
La obligación de presentar el modelo 720 es una declaración informativa que deben realizar los contribuyentes que posean bienes y derechos en el extranjero por un valor superior a ciertos límites establecidos por la ley.
Esta obligación fue establecida por la Administración Tributaria española con el objetivo de controlar y prevenir el fraude fiscal relacionado con la tenencia de activos en el extranjero. El modelo 720 debe presentarse de forma telemática a través de la página web de la Agencia Tributaria.
¿Quiénes están obligados a presentar el modelo 720?
Las personas físicas o jurídicas residentes en España están obligadas a presentar el modelo 720 si cumplen con alguna de las siguientes condiciones:
1. Poseer cuentas en entidades financieras situadas en el extranjero, con un saldo superior a 50.000 euros.
2. Ser titular o beneficiario de valores, derechos, seguros y rentas depositados, gestionados u obtenidos en el extranjero, con un valor superior a 50.000 euros.
3. Ser titular de bienes inmuebles y derechos sobre bienes inmuebles situados en el extranjero, con un valor superior a 50.000 euros.
¿Cuándo debe presentarse el modelo 720?
El modelo 720 debe presentarse durante el primer trimestre del año natural siguiente al que se refiere la información a suministrar. Es decir, si se poseen bienes y derechos en el extranjero a 31 de diciembre de un año determinado, la declaración deberá presentarse antes del 31 de marzo del año siguiente.
¿Qué información debe incluirse en el modelo 720?
El modelo 720 consta de tres secciones principales, cada una correspondiente a uno de los tipos de bienes y derechos mencionados anteriormente. En cada sección se deben incluir los datos correspondientes a cada bien o derecho, como su descripción, país de ubicación, valor de adquisición y saldo o valor a 31 de diciembre.
Es importante destacar que la obligación de presentar el modelo 720 no implica necesariamente la existencia de una obligación tributaria adicional. Sin embargo, la no presentación o la presentación fuera de plazo puede conllevar sanciones económicas por parte de la Administración Tributaria.
¡Comparte este artículo con tus amigos residentes en España que también sean propietarios de inmuebles en el extranjero y ayúdanos a difundir esta información valiosa! Juntos, podemos ayudar a otros a entender mejor sus derechos y obligaciones como propietarios internacionales.