Diferencia entre superficie útil y construida: ¿qué las distingue?

Diferencia entre superficie útil y construida: ¿qué las distingue?
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La diferencia entre superficie útil y construida es un tema que genera confusión en el ámbito de la arquitectura y la construcción. A menudo, estos términos se utilizan indistintamente, lo que puede llevar a malentendidos y errores en la planificación y gestión de un proyecto.

La superficie útil se refiere al espacio interior de un edificio que puede ser utilizado de manera efectiva por sus ocupantes. Incluye todas las áreas destinadas a las actividades principales del edificio, como las habitaciones, salas de estar, baños y cocinas. Además, también se consideran en la superficie útil los espacios complementarios, como los armarios empotrados o los balcones cerrados.

Por otro lado, la superficie construida hace referencia a la suma de todas las áreas construidas de un edificio, incluyendo tanto el espacio útil como los elementos de construcción que no son utilizables por los ocupantes. Esto incluye muros, pilares, escaleras, pasillos y cualquier otro elemento estructural o de servicio que forme parte del edificio.

La principal diferencia entre ambas superficies radica en la exclusión de los elementos no utilizables en la superficie útil. Mientras que la superficie construida engloba la totalidad de la edificación, la superficie útil se centra en el espacio habitable y funcional para los usuarios.

Es importante tener en cuenta esta distinción al momento de realizar cálculos de áreas o al establecer los precios de alquiler o venta de una vivienda. La superficie útil es la que realmente determina la comodidad y funcionalidad de un espacio, por lo que suele ser el criterio más relevante a la hora de valorar una propiedad.

En algunos casos, la diferencia entre superficie útil y construida puede ser significativa, especialmente en edificios con diseños complejos o con elementos estructurales que ocupan un gran espacio. Esto puede dar lugar a discrepancias en los datos proporcionados por diferentes fuentes, como los registros de la propiedad o los planos de construcción.

Para evitar confusiones, es recomendable que los profesionales del sector utilicen los términos de manera precisa y que los propietarios y usuarios de viviendas estén informados sobre la diferencia entre ambas superficies. Esto permitirá una mejor comprensión y evaluación de las características de un inmueble y evitará malentendidos en transacciones inmobiliarias o en la gestión de espacios.

Superficie útil vs superficie construida: ¿Cuál es la diferencia?

La diferencia entre la superficie útil y la superficie construida es importante y puede afectar tanto a la valoración de una propiedad como a la comodidad y funcionalidad de un espacio.

La superficie útil se refiere al espacio interior de una vivienda o local que puede ser utilizado de manera efectiva. Es el área que se puede aprovechar para vivir, trabajar o desarrollar actividades. En el caso de una vivienda, la superficie útil incluye habitaciones, salones, cocina, baños y cualquier otro espacio habitable. En el caso de un local comercial, la superficie útil incluye áreas de atención al cliente, almacenes y zonas de trabajo.

Por otro lado, la superficie construida incluye no solo el espacio útil, sino también los elementos y espacios comunes, como pasillos, escaleras, terrazas, balcones, trasteros, etc. Es decir, la superficie construida es la suma de la superficie útil más los espacios no habitables pero que forman parte de la construcción.

Es importante tener en cuenta esta diferencia al comprar, alquilar o valorar una propiedad, ya que la superficie construida puede ser mayor que la superficie útil, lo que puede resultar en espacios menos aprovechables o funcionales. Por ejemplo, un apartamento de 100 m² de superficie construida puede tener una superficie útil de 80 m², debido a la presencia de pasillos, terrazas o trasteros.

Diferencia entre metros construidos y útiles

La diferencia entre los metros construidos y los metros útiles es un factor importante a tener en cuenta al evaluar una propiedad inmobiliaria.

Los metros construidos se refieren al total de superficie que ocupa una vivienda, incluyendo muros, tabiques, pasillos, escaleras, balcones y terrazas. Estos metros se calculan desde el exterior de las paredes exteriores de la construcción.

Por otro lado, los metros útiles se refieren al espacio interior de la vivienda, es decir, la superficie que realmente se puede utilizar y aprovechar. Estos metros excluyen áreas como muros, tabiques, balcones y terrazas, centrándose únicamente en el espacio habitable.

La diferencia entre ambos tipos de metros puede variar dependiendo de la distribución y diseño de la vivienda. En general, los metros útiles suelen ser entre un 15% y un 20% más bajos que los metros construidos.

Es importante tener en cuenta esta diferencia al comprar o alquilar una propiedad, ya que afectará tanto al precio como a la funcionalidad y comodidad del espacio. Los metros útiles son los que realmente determinan el espacio habitable y son los que se deben considerar al calcular el precio por metro cuadrado.

Si te ha quedado claro cuál es la diferencia entre superficie útil y construida, ¡compártelo con tus amigos para que ellos también lo puedan entender!

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